Con la misma excusa que usamos para postear sobre Perky, la pata indestructible, en Febrero pasado, hablaremos ahora del romance de Petra con... un barco a pedales. La historia va como sigue.
Un cisne llamado Peter empezó a llamar la atención de los paseantes alrededor del lago de Aasee, en la ciudad de Münster (Alemania), durante la primavera boreal del 2006. Esto, porque tuvo la peregrina idea de empezar a seguir y dar vueltas alrededor de un bote a pedales que tiene la forma de cisne. Conclusión: el cisne estaba enamorado.
Llegó el invierno. En Noviembre, el dueño del bote con forma de cisne tenía que retirarlo. Sin embargo, como dijo después, no tuvo el corazón para separar a la "feliz pareja". De manera que llevaron al bote y a Peter, a través de un canal, hasta el zoológico de Münster. Allí, los médicos que examinaron a Peter descubrieron que no era un él, sino un "ella"...
Así es que la cisne, rebautizada ahora como "Petra", pasó el invierno junto con su amorcito el barco a pedales. En Marzo de 2007, ambos fueron liberados de nuevo, con rumbo al lago de Aasee. Los visitantes del lago estaban congratulados ante el pequeño "happy end" de esta pintoresca historia de amor.
Llegó el invierno. En Noviembre, el dueño del bote con forma de cisne tenía que retirarlo. Sin embargo, como dijo después, no tuvo el corazón para separar a la "feliz pareja". De manera que llevaron al bote y a Peter, a través de un canal, hasta el zoológico de Münster. Allí, los médicos que examinaron a Peter descubrieron que no era un él, sino un "ella"...
Así es que la cisne, rebautizada ahora como "Petra", pasó el invierno junto con su amorcito el barco a pedales. En Marzo de 2007, ambos fueron liberados de nuevo, con rumbo al lago de Aasee. Los visitantes del lago estaban congratulados ante el pequeño "happy end" de esta pintoresca historia de amor.