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domingo, 12 de junio de 2011

Dios quiere reformar el sistema fiscal.



Ernest Thirouin fue un mesías bastante particular. Nació el 11 de noviembre de 1863, en el pueblo francés de Falaise (el mismo en donde, dato de trivia aquí, nació Guillermo el Conquistador). Durante años fue lo que podría ser considerado como un ciudadano modelo. En el año 1932, se celebraron elecciones legislativas en Francia, a las que Thirouin se presentó... y mordió el polvo.

¿Fue entonces que algo se descompuso en el reloj muelle del cerebro de Thirouin, o los pajaritos venían sonando de antes? El caso es que abandonó los cauces tradicionales de la política, y empezó a realizarla por medios, dijéramos... más mesiánicos. Partió por declararse el Reformador del Mundo, porque si tienes un programa político güeno, para que te vas a andar con falsas modestias. Editó un montón de folletos, y propició la "reforma revolucionaria", sea lo que sea eso.

En 1936, parece que el título de Reformador del Mundo empezó a quedarle pequeño, y pasó a ser "representante de Dios". Duró cerca de un año en este grado, y luego ascendió a... allá vamos... ¡¡¡DIOS!!! Thirouin explicó entonces que la Biblia miente, algo que debía saber de primera mano siendo Dios, y que la Tierra volverá a ser un Jardín del Edén si se aplica la reforma fiscal y de los seguros sociales que él proponía.

Falleció en 1944 (ignoro si antes, durante o después de que los Aliados en la Segunda Guerra Mundial redujeran el pueblo a escombros a punta de bombardeos, porque Falaise estaba dentro de la zona directa de ocupación nazi). Por increíble que parezca, Thirouin alcanzó a tener seguidores. Una treintena, más o menos, que son incluso menos que los seguidores que tiene este blog Siglos Curiosos, lo que bien pensado es algo penoso para alguien que es nada menos que... ¡Dios! Y todos esos seguidores estaban en la zona de Falaise, por supuesto, que nadie le hizo mucho más caso afuera... y por la falta de referencias sobre el personaje en Google, es poco probable que dicha, er... confesión religiosa... haya sobrevivido hasta nuestros días.

3 comentarios:

  1. Que historia más rara e increible, todo el mundo sabe que Dios...
    ¡SOY YO!

    Bromas aparte, aprovecho para invitarle cordialmente a mi nuevo blog. Un lugar en el que encontrara un batiburrillo de fotos y vídeos antigu@s e historias interesantes o curiosas. Le espero en esta dirección...

    elretronauta.blogspot.com

    Ya sabe que si se hace seguidor/a, recibirá las actualizaciones en su escritorio.

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  2. Mientras en el mundo abundan los locos que se creen Napoleón, en Francia pululan los tarados que se creen Dios, incluyendo al mismo Bonaparte. Ya anoté en un comentario anterior en esta misma bitácora, la curiosidad de que el país que ha impuesto el racionalismo como manera de actuar a nivel oficial, empero sea tan permeable a este tipo de fenómenos. Pero en fin: debe ocurrir porque, por mucho que Francia se sienta orgullosa de su Revolución liberal de 1879 y la trate de exportar al mundo, empero su identidad nacional se la debe a una campesina y fanática religiosa, como lo fue Jeane d'Arc.

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  3. A LORENZO EL RETRONAUTA: Incorporado el Retronauta al blogroll. Suerte con el nuevo proyecto.

    A GALO GÓMEZ: En ese irracionalismo, no creo que los franceses sean diferentes al resto de los pueblos de la Tierra. Lo que sí los hace un poco diferentes es esa vergüenza sistemática acerca de su propia irracionalidad, que los lleva a la Ilustración, 1789, la "Modernidad"... (¿será por eso que alguien como Sartre debía ser francés?). En fin, ellos sabrán...

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