Historias desopilantes, anécdotas curiosas, rarezas antiguas: bienvenidos a los siglos curiosos.
Páginas
▼
domingo, 15 de febrero de 2009
Stanley Kubrick y la inspiración para "2001".
Un detalle interesante de la filmografía de Stanley Kubrick, es que el grueso de la misma, incluyendo sus más renombradas películas, son adaptaciones de cuentos y novelas. En el recuento cabe incluir: "Senderos de gloria" (novela de Humphrey Cobb), "Espartaco" (novela de Howard Fast, inspirada eso sí en el Espartaco histórico), "Lolita" (novela de Vladimir Nabokov), "Doctor Insólito" (novela de Peter George), "La naranja mecánica" (novela de Anthony Burgess), "Barry Lyndon" (novela de William Tackeray), "Nacido para matar" (novela de Gustav Hasford) y "Ojos bien cerrados" (novela corta de Arthur Schnitzler). Pero la génesis de "2001: Odisea del Espacio" tiene sus propios matices.
Parece ser que Stanley Kubrick, director con no poco ego, tenía intenciones de filmar una película que agotara la Ciencia Ficción en el cine para siempre, o poco menos. El título original incluso iba a ser "How the Solar System Was Won" (más o menos: "Cómo el Sistema Solar fue conquistado"). Buscando material literario de base, alguien le recomendó hablar con Arthur C. Clarke, quien lo guió hasta su relato "El centinela". Siempre se ha dicho que "2001: Odisea del espacio" está inspirada o basada en "El centinela" de Arthur C. Clarke, pero esto no pasa de ser anecdótico: el relato muy corto de Clarke (apenas algunas páginas) está agotado en unos pocos minutos de película (concretamente, la escena en que los astronautas desentierran el monolito en la Luna, pasada una media hora de metraje). Todo el resto fue pura invención del guión, aunque en este caso Stanley Kubrick no se resignó a trabajar sin material literario de base, y decidió que entre ambos escribirían el guión y la novela, cada uno centrándose en lo suyo y haciendo recomendaciones a su colega (Clarke escribiendo la novela, Kubrick trabajando el guión). El resultado final es que la novela y la película tienen algunas serias divergencias, a pesar de haber sido trabajados juntos, la más importante de las cuales es que la película se ambienta en Júpiter, y la novela en Saturno (esto se explica porque Stanley Kubrick, perfeccionista como era, nunca dio con un buen efecto especial que le permitiera hacer ver los anillos de Saturno de manera creíble, y mudó la trama entera de la película a un planeta que no tuviera anillos...).
Saludada como obra de culto por la posteridad, la verdad es que "2001: Odisea del espacio" fue recibida con tibieza. El público respondió bien y fue un taquillazo de la MGM, aunque sea por el boca a oreja, pero la crítica la trató con displiscencia. Para valorarla, en Chile se refirieron a ella como "Juan Pérez astronauta", en la idea de que la película tenía efectos especiales tan envolventes que cualquier fulano de la calle podía sentirse astronauta en ella. Con todo, Stanley Kubrick se amargó mucho cuando una década después, "La guerra de las galaxias" atrajo aún más al público y se hizo más popular. Comenzó entonces la larguísima colaboración de Kubrick con Brian Aldiss, otro destacado escritor británico de Ciencia Ficción, para crear otra gran y mayestática película del género, que consagrara definitivamente a Kubrick como el Amo de la Ciencia Ficción en el Cine. Kubrick se murió sin rodarla, de manera que Steven Spielberg tomó el relevo, y ésta fue finalmente "Inteligencia Artificial". Al igual que "2001: Odisea del espacio", en "Inteligencia artificial" el relato de base ("Los superjuguetes duran todo el verano", de Brian Aldiss) es un relatito mínimo, que ocupa apenas algunos minutos del metraje final. Sólo que al revés de Clarke, Brian Aldiss se limitó a escribir un par de cuentos más con las peripecias del personaje, medio adaptando escenas de la película, sin que esta trilogía de cuentos constituya una adaptación literaria propiamente tal de toda ella.
¡Jo!, qué entrada más original. Me he divertido leyendo y curioseando. A mi todo este tema me apasiona.
ResponderBorrarEn un libro reciente de cuentos de Brian Aldiss, en el que republicó su cuento "Los superjuguetes duran todo el verano" y sus dos secuelas ad-hoc, Aldiss escribe un breve prólogo en donde gosipea de lo lindo a Stanley Kubrick, con displiscencia inglesa, sobre los intentos de éste por hacer su peli over-the-top y etcétera. El libro mismo, no tan bueno, pero ese prólogo... Un enlace sobre el libro en cuestión:
ResponderBorrarhttp://www.ciencia-ficcion.com/opinion/op01228.htm
Saludos.