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jueves, 25 de marzo de 2010

Terremoto en las empresas constructoras de Chile.


Como es de dominio público, el pasado 27 de Febrero de 2010 Chile fue sacudido por uno de los más violentos terremotos acaecidos desde que hay registros sismográficos. Lo que originó los previsibles debates acerca de la estabilidad y sismicidad de los edificios. Aunque lo más grave del terremoto se lo llevaron los poblados que fueron azotados por un tsunami, algunos de los cuales fueron literalmente barridos por el agua y sus habitantes piden a gritos que los relocalicen, en cuanto al terremoto mismo (sin incluir el maremoto mencionado), una proporción no demasiado elevada sufrió daños, considerando que el terremoto alcanzó un respetable 8.8 en la Escala Richter. Pero lo significativo del asunto es que mientras la mayor parte de los edificios decenarios y centenarios resistieron casi sin inconvenientes, los edificios más lastimados fueron justamente los construidos en el boom inmobiliario de los '90s y 2000s, que se suponían debían ser más resistentes porque la normativa antisísmica se ha desarrollado más, también la ingeniería necesaria para resistir a los terremotos, y además justamente por ser más recientes tienen menos temblores en el cuerpo. Y se puso peor a la hora de las responsabilidades: según el diario La Nación del Domingo 7 de Marzo de 2010, sólo la constructora Paz Corp respondió públicamente, mientras que las otras guardaron silencio, y algunas demostraron incluso ser simples empresas de papel, sin oficinas y sin páginas web propias...

Las primeras normas modernas sobre edificios antisísmicos en Chile datan de 1939, fecha en que acaeció el Terremoto de Chillán. La normativa vigente para el terremoto de 2010, es la del Decreto 458 de 1975 (Ley General de Urbanismo y Construcción), cuyo artículo 118 bis A (sí, ese adefesio es el número del artículo) le quita las atribuciones de fiscalización a los municipios, y se las traspasa a un revisor externo contratado por la propia empresa constructora. Además de que el contratado tiene un obvio conflicto de intereses (¿le va a decir a la empresa constructora que su edificio es defectuoso, considerando que la empresa le va a pagar?), resulta que sólo se le exige ser Ingeniero Civil. Sergio Contreras, vicepresidente del Colegio de Ingenieros, declaró a La Nación del domingo 7 de marzo de 2010: "Un alumno que viene saliendo, sin ninguna experiencia, puede calcular un edificio. Peor que eso, puede ser un ingeniero químico, un civil industrial que se dedican de (sic) la administración. Eso sí que es un tema complicado, porque en los países anglosajones se le exige a la persona que demuestre hacer ingeniería y recién ahí le dan una licencia para firmar los planos"... Y esto, en uno de los países más sísmicos del mundo.

Otra tormenta se desató cuando en el diario Wall Street Journal, el columnista Bret Stephens escribió que el espíritu del neoliberal Milton Friedman "flotaba protegiendo a Chile en las tempranas horas del sábado". Según Stephens, serían las políticas de libre mercado de Friedman las que lograron que el país "adoptara los códigos de construcción más estrictos". Es reconocido que la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) se inspiró notoriamente en el pensamiento de Milton Friedman para desregularizar extensos sectores de la economía. El economista Paul Krugman salió de inmediato a desmentir a Stephens: es hecho público y notorio que Friedman abominaba de los códigos y las regulaciones que, en su perspectiva, encarecían el costo a las personas. Y después remachó la canadiense Naomi Klein señalando que el grueso de las normas antisísmicas en su versión moderna datan de 1972, es decir, del Gobierno del socialista Salvador Allende, quien al año siguiente fuera derrocado por el Augusto Pinochet que sí trajo a los Chicago Boys al poder...

Y en medio de todo esto, como típica muestra del desprecio de los plutócratas chilenos para con el resto de la población, fue Lorenzo Constans (a la sazón Presidente de la Cámara Chilena de la Construcción) quien se dejó caer con su propia observación chirriante. Cuando se le cuestionó por los edificios inclinados, dijo: "Hay edificios que están inclinados, el ejemplo más claro es la Torre de Pisa que se ha mantenido por siglos en pie". Ante la previsible tormenta de sus no muy sensibles palabras, tuvo que retractarse, mientras que Facebook se llenó de varios grupos de puro sabor folclórico: "LORENZO CONSTANS: METETE LA TORRE DE PISA POR LA RAJA", "NO ENTIENDO CUAL ES SU PROBLEMA.. LA TORRE DE PISA HA ESTADO SIGLOS EN PIE!", "LORENZO CONSTANS: ANDA A VIVIR A TU TORRE INCLINADA PO WEON CHANTA!", "MAS WEON QUE COMPARAR UN EDIFICIO INCLINADO CON LA TORRE DE PISA :O"...

2 comentarios:

  1. Curioso blog, me gusta el diseño y el contenido aunque un poco extenso para mi gusto. Suerte.

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  2. Gracias por las alabanzas, y bueno, si es un poco extenso... Hay más para leer. ;-)

    Saludos.

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